Pablo Vázquez Gonzalez  y María Luisa Barajas Torres

Ellos son mis abuelos paternos sus nombres son Pablo Vázquez Gonzalez y Maria Luisa Barajas Torres, ellos tienen 68 años de edad, mi abuelo nació el día 15 de febrero de 1946 y mi abuela nació el día 27 de septiembre de 1946. Ellos viven en su rancho.

Actualmente mi abuelo se dedica al cultivo de maíz, frijol, sorgo en sus tierras y mi abuela se dedica al quehacer de su casa.

 

A mis abuelos les gusta hacer reuniones familiares, viajar a los Estados Unidos De America, compartir el tiempo con sus hijos e hijas, les gusta asistir a charreadas, etc.

 

Abuelos les quiero agradecer infinitamente por darme un excelente padre, por todos los momentos felices que he compartido con ustedes, gracias por darme sus consejos, sus regaños, su atención, pero mas gracias por darme su amor y acompañarme siempre, por su ayuda cuando más los necesito y por la gran y maravillosa vida que me han dado.

¡Gracias!

Los abuelos

 
 
Tienes blanco los cabellos,
y arrugas en tu cuerpo,
pero hay sabiduría en tus años,
la producida por alegría, tristeza o por los daños.
 
Arrugas por los momentos más felices,
o por aquellos que han dejado cicatrices,
por el dolor acumulado o los errores cometidos,
por haber hecho hermano al enemigo
o por haber perdido al mejor amigo.
 
Sabiduría que brota en tus palabras,
en forma de consejos o regaños,
advertencias que deben ser tomadas en cuenta
y no a la ligera.
 
Tercera edad, que pausas el caminar,
haces lento el hablar,
y poco a poco disminuyes las fuerzas,
también haces que aprendamos a escuchar.
 
Por eso abuelita y abuelito,
no te preocupes si te vas quedando sin dientes,
sigues siento el valiente que siempre admiraré;
 
No te preocupes el ya no caminar aprisa,
así nos tardamos más en llegar a nuestro destino,
y podrás contarme mas historias, de cuando eras niño,
de aquellos tiempos mejores que recuerdas con lágrimas.
 
No te preocupes si hablas despacito,
que escucharte por mucho tiempo necesito,
que para vivir lo que has vivido
no sé si la vida me alcance.
 
No te preocupes, no estas sólito,
tienes muchos nietos, aunque no conozcas sus nombres,
son todos aquellos que esperan que de allá arriba
les permitan llegar a esa bendita Tercera edad.